Reseña de la película: Una Entrevista Con Dios
Título en español: Una Entrevista Con Dios
Título original: An Interview with God
Dirección: Perry Lang
Guion: Ken Aguado
Fotografía: Frank Prinzi
Música: Ian Honeyman
Elenco: David Strathairn, Brenton Thwaites, Yael Grobglas, Hill Harper, Charlbi Dean Kriek
Género: Drama | Misterio
Distribuidora: Imagem Filmes México
País: Estados Unidos
Duración: 97 min.
Fecha de estreno: 11 de enero de 2019
A primera vista el título junto con el tráiler parecen atrayentes, capaz de hacer volar la imaginación con todo tipo de preguntas dirigidas al dios de preferencia; sin embargo, conforme avanza el filme el público se ve atrapado en una historia sacada de libros de auto-ayuda con tendencias proselitistas católico-cristianas y para mayor decepción las preguntas son estériles y las respuestas completamente ambiguas, que en un intento de dar profundidad, terminan causando desesperación ante la evasión de los temas que más que teológicos adquieren un tinte filosófico.
La trama es sencilla, un reportero regresa de cubrir una guerra y se enfrenta ahora a una lucha interna, lidiando con el síndrome de estrés postraumático y la ruptura de su matrimonio; el marco ideal para desestabilizar a cualquiera y pretexto idóneo para que llegue dios a su vida y empezar con una perorata digna del catecismo. Sembrando más preguntas que respuestas, finaliza en lo que pareciera ser un filme de auto-ayuda tan malo como un libro de Carlos Cuauhtémoc Sánchez.
Sinopsis:
Un joven periodista que regresa a casa después de cubrir una guerra, encuentra a su mundo y a su fé puestos a prueba cuando se le concede la entrevista más importante de su vida, una entrevista con un hombre que dice ser Dios.
La dirección de Perry Lang es floja, tiene una mayor experiencia en series televisivas y se queda corto para este filme. El elenco es en su mayoría inexpresivo; a Brenton Thwaites, que interpreta al reportero “Paul Asher”, simplemente no le crees que haya estado en la guerra, y un “Dios” encarnado por David Strathairn, a quien no pareció importarle y cualquier personalidad le viene bien, puesto que es dios. La fotografía es muy buena con una paleta de colores escogida para el sentimiento que trataron de transmitir y un soundtrack que sin mayor aspaviento cumple su función.
El filme puede ser recomendado para quienes gustan de temas teológicos, y aun así se sentirán decepcionados. Para aquellos ateos, paganos o con cualquier otra creencia religiosa, se les puede hacer insufrible o incluso llegar a lo ofensivo mediante la afirmación de que es el dios verdadero, sin tomar en cuenta la aceptación del resto del público.
“Una Entrevista Con Dios” llegará a las salas de cine de México el viernes 11 de enero de 2019.