Reseña de la película: Los Locos Addams
Título en español: Los Locos Addams
Título original: The Addams Family
Dirección: Conrad Vernon, Greg Tiernan
Guion: Pamela Pettler, Matt Lieberman (Personajes: Charles Addams)
Fotografía: Animation
Música: Jeff Danna, Mychael Danna
Clasificación: A
Distribuidora: Universal Pictures México
Elenco: Animation
Género: Animación
País: Estados Unidos
Duración: 88 min.
Fecha de estreno: 25 de Octubre de 2019
Este 25 de octubre llegará a los cines una cinta obligatoria para toda la familia, desde el más pequeño hasta el abuelito saldrán felices de ver esta nueva adaptación de una de las familias más locas y terroríficas de la televisión, basada en las caricaturas publicadas en The New Yorker por Charles Addams. Once años después de la última adaptación de los Addams para VHS (Addams Family Reunion) estos hilarantes personajes estrenan versión animada gracias a las distribuidoras de MGM y Universal Pictures.
El largometraje nos presenta a la ya conocida familia compuesta por Morticia, Homero, Largo, Merlina, Pericles y la abuela –además del tío Cosa, tío Lucas y demás miembros esporádicos del clan− quienes viven en una aparente calma hasta que una tradición importante los agobia, Pericles debe mostrar su uso de la espada ante todos los Addams y así probar ser capaz de protegerlos a cualquier costo. A causa de la intromisión de una restauradora de interiores y su obsesión por “arreglar” la mansión para la celebración familiar, la vida de todos comienza a desmoronarse, más cuando Merlina empieza a preguntar ¿cómo es allá afuera?
La animación está perfectamente cuidada, los personajes parecen estar basados en los actores de la serie original de los Addams y hasta dan algunos guiños a la misma –la capacidad de tío Lucas para encender bombillas con la boca−, aquella en blanco y negro y estrenada en 1964 y que aún puede verse esporádicamente por algún canal de televisión de paga, aunque algunas otros elementos –como la edad de Merlina y Pericles−se mantienen fieles a las películas de los noventa. Los rasgos faciales de cada uno son –aunque parezca contradictorio si se piensa en esta familia− lo que les llena de vida, pues incluso la seriedad mortuoria característica de Largo o Merlina se ven creíbles gracias al movimiento de ojos.
La historia se centra principalmente en las vivencias de los dos hijos, quienes comienzan a tener formas particulares de pensar, yendo contra las ideologías familiares en su mayoría. A estas historias paralelas se le suma una tercera trama que precipitará al clímax a las otras dos en un momento dado y que si bien parece no encajar con el tipo de humor negro y macabro usado por los Addams, funciona para dar la moraleja incluyente y llena de tolerancia que pareciera requisito de todas las cintas –más si son infantiles−en estos años. Si bien hay momentos en que la narrativa podría parecer aburrida, las referencias a las películas y serie mantienen al espectador interesado.
Aunque esta cinta es una buena adaptación –con problemáticas de esta época y mensajes en pro de la autoestima de los niños−se queda corta a comparación de la serie o las películas estelarizadas por Christina Ricci y Anjelica Huston, versión más sombría pero considerada como un clásico por los nacidos en la década de los noventa. Pero como excusa, puede decirse que está pensada para niños, en su intento de acercarlos a esta familia tan excéntrica y cuidando no dar demasiado miedo a una generación a la que pareciera impresionarle todo.