Reseña de la película: La Gran Aventura LEGO 2

Título en español: La Gran Aventura LEGO 2
Título original: The LEGO Movie 2: The Second Part
Dirección: 
Mike Mitchell
Guion: 
Raphael Bob-Waksberg, Phil Lord, Christopher Miller, Matthew Fogel (Historia: Michelle Morgan, Dominic Russo)
Música: 
Mark Mothersbaugh
Clasificación: 
A
Género: 
Animación
Distribuidora: 
Warner Bros. Pictures México
País: 
Estados Unidos
Duración: 
110 min.
Fecha de estreno:
 14 de febrero de 2019

¿Qué pasa cuando mezclas Toy Story, Mad Max, Looper y les pones un poco de diamantina? El resultado es sorprendentemente orgánico. De alguna manera Phil Lord y Christopher Miller logran establacer una amalgama de géneros bastante interesante para darle vida a esta entretenida, más no espectacular, secuela basada en la popular franquicia danesa de juegos para niños (y adultos, considerando los tiempos).

Después del inesperado éxito de “Lego: la Película” (2014), el dúo vuelve para explorar algunas ideas que seguramente quedaron en el tintero desde entonces. Parece mentira que hayan pasado cinco años entre un filme y otro, sobre todo por el estatus de vigencia que la franquicia ha logrado mantener en la cultura popular gracias a una potente campaña de marketing, a los juegos de video y a una serie de spin-offs que han provocado opiniones dividas en la crítica. Sobre todo, si comparamos el recibimiento de “Lego: Batman” (2017) con el de “Ninjago” (2017) por ejemplo.

Lego 2 arranca justo donde termina la primera: Emmet y compañía se sorprenden ante la llegada de seres dulcemente extraños que, a todas luces, amenazan su existencia. La forma en que deciden abordar la situación en ese momento desencadena un cambio radical para su mundo y para la dinámica en su relación, dando inicio a la aventura. Una misión por recuperar lo perdido pero que quiere a su vez, enseñarnos sobre la necesidad de adaptarse a los cambios.

En esta ocasión la silla de director es ocupada por Mike Mitchell y para detraimiento de la película, se nota. Mike es principalmente conocido por su trabajo en secuelas cuyo éxito ha sido moderado (Shrek 4, Alvin y las ardillas 2, Bob Esponja 2). Proyectos que, si bien portan el nombre de franquicias poderosas, han funcionado más para mantenerlas vivas que para enriquecerlas. Son esas entregas que adoras por incluir a tus personajes favoritos, pero que siempre te dejan deseando un poco más de esa chispa original y creo que ese es el caso aquí. Sin duda, al igual que en su antecesora, hay una importante lección detrás que sirve tanto a niños como adultos. Eso merece el aplauso de aquellos que valoramos el contenido emocional que trasciende. En lo que se refiere a animación, es impecable. El foto-realismo alcanzado aquí es buenísimo; desde la reflectividad de las texturas hasta la sensación de masa y volumen en las piezas. Habiendo dicho lo anterior; siento que es la ejecución del argumento y principalmente su ritmo los que me hacen dar un suspiro de nostalgia cuando pienso en la primera entrega. Quizás se debe a que ahora conocemos las reglas bajo las cuales opera este universo y eso hace que algunos arcos argumentales carezcan del mismo impacto emocional al momento de ser revelados. Aunque no puedo evitar pensar que el primer acto, en comparación con el segundo y el tercero es mucho más interesante en términos conceptuales. Pues nuevamente tenemos la oportunidad de ver la capacidad infinita que tiene lego de imaginar mundos solo para abandonar esa premisa y quedarnos con dos sets. Que sí son interesantes, pero que a mi gusto pierden novedad muy rápido. Por ejemplo: pasar buena parte del tiempo en el mismo lugar, trae como consecuencia una paleta de colores estática. Del mismo modo, eso evita conocer una mayor cantidad de personajes sorpresa o en este caso “modelos” especiales como en algún momento conocimos al astronauta, al pirata, al gatito e incluso a la liga de la justicia. En ese sentido, no encuentro apariciones memorables que por sí mismas den a esta entrega su propia identidad.

En todo caso, me habría encantado ver una relación más de “equipo” entre el grupo, pero los personajes secundarios están ahí para aportar comedia, que, si bien no es nada despreciable, tampoco los lleva a ningún lado como personajes. Excepto quizás a Batman, pero luego entonces: ¿Qué no había tenido ya su propio arco? Del mismo modo, podría aceptar a los mismos personajes en una entrega posterior si todo fuera parte de un esquema más grande. De una historia desarrollada a lo largo de una trilogía, por ejemplo. Pero con todo y el teaser al final de la primera, a mi quedó claro que la historia había concluido. Lo mismo aquí. De modo que, si se el equipo de producción se aventura a hacer una tercera película, posiblemente esté aparentemente conectada a las historias anteriores por virtud de uno que otro suceso o por la presencia de algunos personajes, más no por diseño. Eso me queda claro.

Posiblemente estoy desmembrando demasiado a un filme que tiene como objeto entretener a la familia y en ese sentido, cumple y cumple muy bien. Por lo menos en relación a otras franquicias. Si lo que estás buscando es devorarte unas palomitas sin pensar demasiado en la historia, pero salir con la sensación de que aprendiste algo, entonces te recomiendo ampliamente Lego 2: La gran aventura.

Este filme llegará a las salas de cine de México el jueves 14 de febrero de 2019.

Marco Korreli