Reseña de la película: Entre la Razón y la Locura

Título en español: Entre la Razón y la Locura
Título original: 
The Professor and the Madman
Dirección: 
Farhad Safinia
Guion: 
John Boorman, Todd Komarnicki, Farhad Safinia (Novela: Simon Winchester)
Fotografía: 
Kasper Tuxen
Música: 
Bear McCreary
Elenco: 
Mel Gibson, Sean Penn, Natalie Dormer, Ioan Gruffudd, Jeremy Irvine, Brendan Patricks, Adam Fergus, Kieran O’Reilly, Bryan Quinn, David Crowley, Olivia McKevitt, Malcolm Freeman, Robert McCormack, Abigail Coburn
Género: Drama
Distribuidora: 
Imagem Filmes México | LATAM Pictures
País: 
Estados Unidos
Duración:
124 min.
Fecha de estreno:
 15 de Marzo de 2019

En ocasiones las decisiones al momento de traducir los títulos originales al español hacen poco por ayudar a la cinta objeto de la traducción, al generar una expectativa que poco tiene que ver con el material que se mostrará en pantalla. Un poco en esta situación se halla Entre la Razón y la Locura (2019) de Farhad Safinia, y cuyo título original es The Professor and the Madman (El profesor y el insano).

La cinta, basada en el libro The surgeon of Crowthorne del autor Simon Winchester, narra no la discordia entre la razón y la locura, sino la labor que James Murray (el profesor del título original, encarnado por Mel Gibson) enfrenta para dar forma y publicar el diccionario de la lengua inglesa Oxford, una labor que, como se señala al poco de iniciada la historia, ha resultado titánica en las ocasiones anteriores que se ha tratado de llevar a cabo.

Es así como Murray decide lanzarse la tarea con una propuesta nueva, la cual consiste en solicitar ayuda de todos los habitantes del Reino Unido, para que ellos sean los que envíen las palabras cuando las encuentren en las diversas publicaciones a las que tengan acceso, y sea el personal a su cargo el que las revise y anote en caso de que sean pertinentes. Gracias a esta decisión es que entra en contacto con el doctor William Chester Minor (Sean Penn) un cirujano estadounidense retirado y exiliado en Inglaterra, quien se encuentra en confinamiento psiquiátrico tras una serie de vicisitudes acaecidas tanto en Estados Unidos como en Inglaterra.

Así, se genera una relación de trabajo y después amistad entre ambos hombres, ya que el Dr. Minor resulta ser uno de los colaboradores más productivos para la empresa de Murray. Y es justo esa porción, la dedicada a la labor de integrar y consolidar el diccionario y la amistad, la que resulta la más lograda de la cinta.

Al principio de la historia, cuando le es encomendada la tarea al personaje de Gibson, este refiere que lo que se busca lograr es lo que ya se ha logrado en las ciencias exactas, es decir, un compendio regulador que sirva de herramienta a la lexicografía y la lingüística para normar el habla inglesa. Este logro de las ciencias exactas puede extrapolarse al dominio que tienen a nivel cinematográfico como material para historias originales, siendo las humanidades un campo poco frecuentado en las grandes producciones. Así, el producto mostrado en pantallas por parte de Farhad Safinia, al menos en lo tocante a la parte de mostrar la dificultad de establecer un diccionario (sus alcances, sus prioridades, sus referencias, etc.), emparenta a la película con otras sobre genios (a veces atormentados) que logran avances significativos en sus campos de estudio, como podrían ser A Beautiful Mind (2002) de Ron Howard o The theory of everything (2014) de James Marsh.

A la vez, el registro que logran Gibson y Penn es algo que mantiene la atención sobre la cinta. Acaso debido a que un par de temas satélites de la cinta son el perdón y la posibilidad de redención, las actuaciones de ambos histriones tiene una carga natural de gran impacto, que puede deberse a que ellos mismos han sentido en la piel el peso de la condena debida a las decisiones, excesos y consecuencias de estos que han enfrentado a lo largo de su vida, sobre todo en la última década. Algo cuestionable, pero que no afecta en gran medida el resultado final, sería por momentos excesiva carga melodramática con la que se acercan a los problemas que sus personajes enfrentan, así como la incapacidad ocasional que Gibson tiene para mantener el acento escocés de Murray.

Lo único que hace que en ocasiones la cinta resulte tediosa es la necesidad de meter momentos románticos, sobre todo en la vida de Minor. Estos momentos, en los cuales se busca condensar extractos de su vida psiquiátrica en detalles realizados por amor (los cuales no ocurrieron de esa forma), hacen que se pierda el ritmo que se ha logrado sin la necesidad de lo mismo. Esas y otras escenas poco creíbles, tanto en el contexto histórico general como en el contexto de verosimilitud establecido por el universo contenido de la narración, hacen que la cinta pierda cohesión y se sienta como dos historias separadas que buscaron juntarse sin lograr el tono adecuado.

A pesar de lo anterior, la película resulta mayormente disfrutable, con un buen acabado en la musicalización y la recreación de la Inglaterra de finales del siglo XIX y principios del XX, logrando que el tema principal se logré sentir cercano al espectador que le dé una oportunidad.

«Entre la Razón y la Locura» llegará a las salas de cine de México el viernes 15 de Marzo de 2019.

Alberto Marín