Reseña de la película: Cadáver
Título en español: Cadáver
Título original: The Possession of Hannah Grace
Dirección: Diederik Van Rooijen
Guion: Brian Sieve
Fotografía: Lennert Hillege
Música: John Frizzell
Elenco: Shay Mitchell, Stana Katic, Grey Damon, Louis Herthum, James A. Watson Jr., Larry Eudene, J.P. Valenti, Arthur Hiou, Lexie Roth, Shawn Fitzgibbon, Jacob Ming-Trent, Mickey Gilmore, Lisa Wynn, Kirby Johnson, Kenneth Israel, Matt Mings
Género: Terror
País: Estados Unidos
Duración: 85 min.
Fecha de estreno: 30 de Noviembre de 2018
Cadáver es la nueva apuesta por darle otro enfoque a un exorcismo, pues ahora nos muestra el después de…
Sinopsis:
Un estremecedor exorcismo se vuelve incontrolable, cobrándose la vida de una joven. Meses después, mientras Megan Reed (Shay Mitchell) trabaja en el turno de noche de la morgue, recibe un cadáver desfigurado. Sola y encerrada en los pasillos del sótano, Megan comienza a experimentar espeluznantes visiones, lo que le hace sospechar que el cuerpo que ha recibido está poseído por una despiadada fuerza demoníaca.
Cuando parece que todo se ha resuelto en el exorcismo a Hannah Grace, muere y su cadáver es llevado a la morgue, donde recién ha entrado a trabajar Megan Reed, una ex policía con un pasado sin resolver, para cubrir el turno nocturno y que tendrá que adecuarse al ambiente solitario, mientras que descubre que el nuevo cuerpo podría estar aún con vida. Veremos cómo un exorcismo sin terminar puede tener fatales consecuencias .
Opinión de la Película:
Resulta interesante que el exorcismo de Hannah no sea el foco de atención de la cinta, y que nos muestren, irónicamente contraria a otras películas con la temática, lo que pasa cuando muere el cuerpo habitado y la entidad continúa acechando, dando una visión renovada y adentrarnos en la solemnidad de una morgue, sintiendo la opresión y las limitaciones de no ser un espacio al exterior.
Es una película genérica que a pesar de contar con una premisa interesante y arriesgarse con tomas que se dedican a hacernos sentir parte de la misma, recae justo en los errores de las cintas de este tipo, con screamers o ataques innecesarios de los que los personajes principales son ajenos por motivos de un guion que abusa del pasado atormentado para no explotar del todo a sus personajes. Técnicamente, falla por momentos en los efectos que requiere mostrar a un cadáver viviente, pero cumple y presenta buenos escenarios.
Shay Mitchell aunque en momentos es convincente, no tiene el perfil para un protagonismo, pues no se siente natural y no expresa más allá de un confort acorde al escepticismo y el temor que le requiere el papel, en el reparto no hay quien destaque y al menos en eso, hay uniformidad en el equipo.
Para una tarde con los amigos, en donde lo esencial es disfrutar el momento sin pretensiones, es ideal, así como para compartir sobre lo nuevo de temáticas de exorcismo, este 30 de noviembre.